Este domingo, la Hermandad de la Esclavitud de la Santa Vera Cruz de Almagro vivió una jornada emotiva e histórica con la reposición al culto de la imagen de María Santísima de los Dolores tras un mes de ausencia debido a un delicado proceso de limpieza y conservación. La ceremonia tuvo lugar en la Ermita de Santa Ana, donde la comunidad almagreña se congregó para rendir homenaje a su venerada imagen en un solemne acto, que marcó el regreso de la Virgen a su lugar de culto.
Reposición al culto y besamanos de María Santísima de los Dolores
Después de un mes de cuidados y restauración, la imagen de María Santísima de los Dolores regresó a la Ermita de Santa Ana, donde fue recibida con emoción y fervor por los feligreses. El delicado proceso de limpieza y conservación realizado durante su ausencia buscaba preservar la belleza y espiritualidad de la talla, que es una de las más queridas y veneradas por los fieles de Almagro.
El acto central de la jornada fue el besamanos solemne, en el que los devotos pudieron acercarse a la imagen para expresar su cariño y respeto. Las oraciones reflejaron el profundo amor que el barrio de Santa Ana, y la localidad de Almagro, siente por la Virgen de los Dolores, una devoción que se ha transmitido de generación en generación.
III Exaltación a Nuestra Señora de los Dolores
La celebración continuó con la III Exaltación a Nuestra Señora de los Dolores, a cargo de don Luis Maldonado Fernández de Tejada, un ferviente devoto y conocedor de la historia y significancia de esta advocación mariana. Su emotiva intervención resonó entre los presentes, quienes se vieron profundamente conmovidos por sus palabras.
Maldonado destacó el papel de María Santísima de los Dolores como ejemplo de amor, sacrificio y esperanza en los momentos de mayor sufrimiento, conectando su figura con la vida cotidiana de los fieles. Su exaltación fue un homenaje sentido que reforzó los lazos de devoción entre los miembros de la Hermandad y la imagen venerada.
Reconocimiento a los Hermanos y nuevas incorporaciones
El evento también incluyó un acto conmemorativo en honor a los hermanos que han cumplido 50 y 25 años de pertenencia a la Hermandad. Este reconocimiento fue un momento especial para recordar el compromiso y la fe de quienes han dedicado gran parte de sus vidas a la Hermandad de la Esclavitud de la Santa Vera Cruz.
Asimismo, se llevó a cabo la imposición de medallas a los nuevos hermanos, quienes ahora forman parte de esta gran familia devocional. Los nuevos miembros fueron recibidos con calidez y gratitud, mientras se comprometían a continuar el legado de fe y servicio en honor a María Santísima de los Dolores.
Un día de fe, tradición y devoción
La celebración culminó con el tradicional canto de la Salve a la Virgen, un acto cargado de solemnidad que llenó de esperanza y unión a los asistentes. El ambiente en la Ermita de Santa Ana reflejaba la profunda devoción que el barrio y la localidad de Almagro sienten por su Madre, María Santísima de los Dolores. La jornada concluyó en un clima de oración y reflexión, consolidando una vez más el papel central de la Virgen en la vida espiritual de Almagro.
Presencia institucional
El acto contó con la asistencia de autoridades locales, entre ellas el alcalde de Almagro, Francisco Javier Núñez, y la concejal de infancia, juventud y familia, Eva Ortega, quienes participaron activamente en la ceremonia en representación del Ayuntamiento de Almagro. Su presencia destacó la relevancia de este evento en la vida social y religiosa de la localidad.
