El diputado regional por Ciudad Real, Luis Blázquez, ha exigido a la Junta de Castilla-La Mancha que continúe colaborando económicamente con el programa de comidas a domicilio en los municipios de menos de 5.000 habitantes de la región. Blázquez ha recordado que, hasta ahora, la administración regional colaboraba con las diputaciones provinciales y con algunos ayuntamientos en la financiación de los costes de estos servicios. Sin embargo, en la actualidad, la Junta ha decidido retirar los recursos para el ejercicio 2024.
“El abandono de este programa por parte de la Junta es inaceptable. Han delegado sus responsabilidades y han abandonado a esas 3.500 familias que dependen del servicio de comidas a domicilio vinculado al programa de ayuda a domicilio,” ha declarado Blázquez. “Estos servicios seguirán prestándose gracias al esfuerzo de las diputaciones provinciales, pero la Junta no puede desentenderse de su responsabilidad.”
Blázquez ha cuestionado que el motivo de la retirada de la financiación sea la falta de medios económicos, recordando que el ejecutivo regional sí tiene fondos para otros gastos, como las “paguitas” de 15 millones de euros para cargos de la Junta, el cambio de ubicación y la adecuación de un nuevo edificio para las Cortes o el aumento en el gasto de la propaganda electoral. “Es evidente que la falta de recursos no es el verdadero problema, sino una cuestión de prioridades mal gestionadas”, ha señalado el diputado.
Por todo ello, Blázquez ha instado a la Junta a que exija al Gobierno de España establecer la prioridad nacional en el acceso a las ayudas sociales, incluyendo las prestaciones de comidas a domicilio. “Es fundamental garantizar el cuidado, la dedicación y la atención a nuestros mayores y dependientes, reforzando las partidas de dependencia y las ayudas para el cuidado del hogar y la atención a la soledad no deseada”, ha enfatizado.
Finalmente, Blázquez ha exigido a la Junta de Comunidades que se haga cargo de la financiación de los programas de comida a domicilio, subrayando la importancia de mantener estos servicios esenciales para las familias más vulnerables de Castilla-La Mancha y para combatir la despoblación de los pequeños municipios rurales.
