El Centro de Día de Mayores de Miguelturra vivió una intensa jornada matutina este pasado martes con la realización de un simulacro de incendio. Aunque se trató de un ejercicio práctico, las alarmas y los protocolos se activaron como si de una emergencia real se tratase, con el objetivo de familiarizar a usuarios y trabajadores con las medidas de seguridad ante un posible incendio.
Simulacro para maximizar la seguridad de los mayores
El principal objetivo del simulacro fue preparar a las personas que asisten al centro, muchas de ellas con movilidad reducida, sobre cómo actuar en caso de emergencia por incendio. La práctica buscaba asegurar que todos conozcan las medidas necesarias para salvaguardar su seguridad en una situación real.
Desarrollo del simulacro
Alrededor de cincuenta personas se movilizaron al sonar las alarmas. Los trabajadores y usuarios con capacidad de desplazamiento evacuaron el edificio en menos de cinco minutos, dirigiéndose a la plaza como punto de encuentro establecido en el plan de emergencias. Las personas de estancias diurnas con movilidad reducida, junto con sus cuidadores, se trasladaron a las zonas seguras designadas dentro del edificio. En total, se evacuó a seis personas y su terapeuta en la primera planta y a once personas más, con su terapeuta, en la segunda planta.
Pocos minutos después, llegaron dos camiones de bomberos de Ciudad Real para simular la evacuación de las personas que permanecían en el interior. Dado que se trataba de un simulacro, se optó por no utilizar la cesta de evacuación con los mayores. El ejercicio se centró en simular de manera convincente el rescate y la extinción del supuesto incendio.
Coordinación y evaluación del simulacro
Estos simulacros son de carácter obligatorio y se realizan una vez al año. En esta ocasión, la organización corrió a cargo de la directora del Centro de Día, Marisa Gómez, en colaboración con una comisión del parque de bomberos de Ciudad Real, que también aprovechó la ocasión para revisar el plan de emergencias del centro.
El jefe de la unidad de Ciudad Real, Álvaro Muñoz, explicó la importancia de que el simulacro se desarrollara con la mayor fidelidad posible a una situación real, incluyendo el factor sorpresa para los usuarios. El objetivo principal es minimizar el pánico y garantizar una evacuación eficaz en caso de una emergencia real por incendio.
Formación complementaria
Además de este simulacro práctico, los trabajadores del centro recibirán en el mes de marzo una formación teórica complementaria sobre cómo actuar ante situaciones de emergencia.
Este simulacro en el Centro de Día de Mayores de Miguelturra refuerza el compromiso del Ayuntamiento y los servicios de emergencia con la seguridad y el bienestar de los mayores, preparándolos para actuar de forma adecuada ante cualquier eventualidad.
