Un bombero de 61 años ha resultado herido con quemaduras de segundo grado durante unas prácticas con fuego real. El suceso ha tenido lugar en Puertollano en torno a las 13:00 horas del mediodía, cuando el profesional participaba en un ejercicio de simulacro que acabó con consecuencias imprevistas.
Según ha informado el Servicio de Emergencias 112 de Castilla-La Mancha, tras recibir el aviso de urgencia, se movilizó inmediatamente una ambulancia de soporte vital básico para asistir al afectado en el mismo parque de bomberos. Una vez estabilizado, fue trasladado de urgencia al hospital Santa Bárbara de Puertollano para una primera atención médica.
Sin embargo, dada la gravedad de las lesiones —quemaduras de segundo grado— y la necesidad de atención especializada, el bombero fue derivado posteriormente al Hospital Universitario de Getafe (Madrid), centro de referencia nacional en el tratamiento de grandes quemados. El traslado se realizó en la misma ambulancia de soporte vital básico, acompañado por personal sanitario especializado.
En el operativo también intervinieron agentes de la Policía Nacional, que se desplazaron al lugar de los hechos para colaborar con el protocolo de actuación y elaborar el correspondiente atestado, con el fin de esclarecer cómo se produjo el accidente durante la simulación.
Este tipo de ejercicios con fuego real forma parte del entrenamiento habitual que los bomberos realizan para mantener su preparación ante situaciones extremas, pero en ocasiones pueden derivar en situaciones peligrosas si se producen fallos de seguridad o circunstancias imprevistas.
Según fuentes del SCIS el bombero se encuentra consciente y en observación en la Unidad de Grandes Quemados del Hospital Universitario de Getafe donde fue derivado desde el servicio de urgencias del Hospital de Santa Barbara de Puertollano, a la espera de la evolución de las heridas y que no tengan repercusión en partes vitales de su cuerpo.