Los Pozuelos de Calatrava se enfrenta desde la tarde del viernes a un incendio forestal que ha obligado a desplegar un amplio operativo de extinción coordinado por el Gobierno de Castilla-La Mancha. El fuego, detectado a las 18:09 horas del viernes 18 de julio por un vigilante fijo del sistema de vigilancia forestal, continúa activo y aún no ha sido dado por controlado, a pesar de los esfuerzos ininterrumpidos de los medios de extinción.
Durante la jornada del viernes, más de un centenar de personas trabajaron intensamente sobre el terreno, movilizándose un total de 21 medios para contener las llamas que amenazan una valiosa superficie natural del término municipal. Según los datos facilitados por el Sistema de Información de Incendios Forestales del Ejecutivo autonómico, se desplegaron tres medios aéreos con tres personas a bordo, junto a 18 medios terrestres integrados por 86 efectivos, y otros 15 profesionales más de personal interno especializado en gestión de incendios.
El operativo ha contado con la intervención de brigadas de bomberos forestales (BBFF), agentes medioambientales (AAMM), técnicos de coordinación y personal logístico, que han trabajado bajo condiciones meteorológicas complejas, con altas temperaturas, baja humedad y rachas de viento que dificultaron las tareas de control.
Este sábado, los trabajos de extinción prosiguen sobre el terreno, aunque el número de efectivos y medios ha disminuido conforme se ha logrado contener parcialmente el avance del fuego. En total, seis medios terrestres con 24 profesionales, además de cinco técnicos de apoyo y personal interno, se encuentran desplegados desde primeras horas de la mañana para continuar las labores de enfriamiento, vigilancia y control de posibles reactivaciones.
A lo largo de la emergencia, se han incorporado de forma escalonada cuatro medios aéreos y ocho medios terrestres adicionales, sumando un total de 36 efectivos especializados en lucha contra incendios, quienes han actuado en zonas de difícil acceso para evitar que el fuego alcanzara masas forestales de mayor densidad.
Por el momento, no se han reportado daños personales ni evacuaciones, aunque se mantiene un seguimiento permanente del perímetro y de los posibles cambios en la evolución del incendio. Las autoridades autonómicas y locales apelan a la responsabilidad ciudadana y recuerdan la importancia de extremar la precaución durante el periodo de alto riesgo por incendios forestales, especialmente en una región como Castilla-La Mancha, que combina temperaturas extremas con una elevada densidad de superficie forestal y matorral.