El emblemático Corral de Comedias de Almagro, joya del teatro clásico español, volvió a brillar con luz propia en la tarde-noche de este jueves gracias a la representación de “Don Quijote de la…”, un montaje multidisciplinar que combinó teatro y música barroca y que logró conquistar al numeroso público que llenó por completo el recinto.
La obra, fruto del proyecto de innovación educativa “Emociones en escena. Explorando los clásicos del Siglo de Oro”, fue puesta en escena por la Compañía Joven Claverarte del IES Clavero Fernández de Córdoba de Almagro. Bajo la dirección de la profesora de lengua Carmen María Díaz-Ropero, los alumnos de 4º de la ESO de la materia de Artes Escénicas ofrecieron una entretenida e ingeniosa representación basada en textos clásicos y en la figura universal de Don Quijote de la Mancha, conjugando palabra, gesto y sentimiento con una soltura sorprendente.
Acompañando a la compañía teatral se situó, a pie de escena, la Orquesta de Cuerda del Conservatorio Profesional de Música Alcázar-Criptana, dirigida por Fernando Bustamante, que interpretó la “Suite Don Quijote” del compositor barroco G. P. Telemann, hilando con sus notas cada transición emocional de la obra y enriqueciendo con profundidad sonora cada escena.
La función, que alternó pasajes cómicos, líricos y dramáticos, sirvió como un puente artístico entre dos referentes culturales de Castilla-La Mancha: Almagro, cuna del teatro clásico, y Campo de Criptana, símbolo de la tradición musical. Esta colaboración, además, fue un ejemplo vivo del poder transformador del arte en la educación, generando una experiencia formativa y emocional tanto para los jóvenes intérpretes como para el público.
Un espectáculo de jóvenes, con calidad profesional
El público, que abarrotó el Corral y premió con aplausos sostenidos la entrega de los alumnos y músicos, incluyó la presencia institucional de José Caro, delegado provincial de Educación y Cultura; el alcalde de Almagro, Francisco Ureña; la concejala de Cultura, Marian Ureña; el segundo teniente de alcalde, Genaro Galán, y otros representantes del equipo de gobierno local. También asistieron familiares, profesores y vecinos que no quisieron perderse esta cita con el talento emergente.
Cada escena fue cuidadosamente construida, permitiendo a los estudiantes explorar el legado cervantino desde una mirada emocional y contemporánea. Con una escenografía sencilla pero efectiva, y un dominio del espacio escénico sorprendente para su corta edad, los jóvenes actores demostraron madurez interpretativa y pasión por el teatro.
La orquesta, por su parte, elevó el espectáculo a otro nivel, con una interpretación precisa, rica en matices y sensibilidad, que conectó con la narrativa de forma orgánica. El resultado fue un espectáculo redondo, en el que música y palabra se dieron la mano para rendir homenaje a Don Quijote y al teatro del Siglo de Oro desde una óptica fresca, educativa y profundamente humana.
Innovación educativa con alma
Este proyecto es una apuesta decidida por la educación artística integral, una propuesta innovadora que permite a los alumnos aprender desde la vivencia, el trabajo en equipo, la creatividad y la emoción. El dirección pedagógica de Carmen María Díaz-Ropero ha sido clave para que “Emociones en escena” se consolide como un referente de buenas prácticas docentes en Castilla-La Mancha.
Por su parte, la colaboración con el Conservatorio de Música de Alcázar-Criptana —con la implicación de sus directores musicales Miguel Corrales y Fernando Bustamante— ha enriquecido el proyecto, abriendo nuevos horizontes de cooperación intercentros que enriquecen el tejido educativo y cultural de la región.
“Don Quijote de la…” demostró que los clásicos del Siglo de Oro aún tienen mucho que decir en el siglo XXI y que el legado cervantino puede seguir inspirando nuevas generaciones desde las aulas, los atriles y los escenarios.
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