El Almagro Fútbol Sala Femenino (FSF) afronta este domingo, 7 de septiembre, a las 12:00 horas en el Pabellón Municipal “Gemma Arenas” de Almagro, un emocionante compromiso deportivo: la semifinal del “X Trofeo JCCM” de Fútbol Sala Femenino, que lo medirá al Salesianos Puertollano. El duelo, cargado de rivalidad y expectación, otorgará un billete directo para la gran final de esta prestigiosa competición organizada por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
El rival de las rojillas llega con la moral reforzada tras su contundente victoria en cuartos de final frente al Albacete FSF (9-0), en un encuentro celebrado en el Pabellón Santiago Cañizares de Puertollano. Por su parte, el conjunto encajero, al igual que el CD Chiloeches, accede directamente a esta ronda semifinal por designación.
Una rivalidad al rojo vivo
El enfrentamiento no será un simple trámite, sino un nuevo capítulo de la intensa rivalidad deportiva que protagonizan ambos clubes. La semana pasada, en la final del Trofeo Diputación Provincial de Ciudad Real, las almagreñas se proclamaron campeonas tras imponerse al Salesianos en la tanda de penaltis (3-2), después de un emocionante tiempo reglamentario que concluyó con empate a dos.
El técnico Jaime García es consciente de la dificultad del choque y de la calidad del conjunto puertollanero, que ya demostró en la citada final ser un equipo sólido y competitivo. Consciente de ello, el preparador encajero trabaja estos días en ajustar al máximo la preparación de su plantilla, incorporando a los nuevos fichajes que deberán desempeñar un papel crucial en la inminente temporada liguera.
La liga, un reto de máxima exigencia
La competición oficial arrancará el próximo 20 de septiembre en el Grupo III de Segunda División de Fútbol Sala Femenino, donde tanto Almagro como Salesianos volverán a encontrarse a lo largo de un calendario que promete ser tan apasionante como exigente.
Sobre este nuevo curso, Jaime García advierte:
«El grupo será muy exigente y habrá proyectos muy fuertes luchando por el ascenso. Aquí cualquier partido puede decidir la clasificación».
El equipo rojillo, con una mezcla equilibrada de experiencia, juventud y hambre competitiva, encara la temporada decidido a mantener vivo el sueño del ascenso que se escapó por muy poco el año pasado.