El Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado un paso adelante en la lucha contra la ludopatía, especialmente entre los jóvenes. Con el objetivo de sensibilizar y concienciar sobre los riesgos del juego excesivo, ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de formación dirigido a docentes y orientadores escolares.
Esta iniciativa, presentada por el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, busca dotar a los profesionales de la educación de las herramientas necesarias para identificar y prevenir posibles casos de ludopatía entre el alumnado. El programa, que se desarrollará a lo largo de varios meses, abordará temas como los tipos de juego, los procesos psicológicos implicados, los síntomas de la ludopatía y las estrategias de prevención.
Un enfoque integral
Además de la formación a docentes, el Gobierno regional ha anunciado una campaña informativa sobre juego responsable que se difundirá a través de diversos canales, como medios de comunicación y publicidad exterior. El objetivo es llegar a un amplio público y concienciar sobre los riesgos asociados al juego excesivo.
Estas medidas se enmarcan en la nueva Ley de Régimen Administrativo y Fiscal del Juego de Castilla-La Mancha, que establece medidas preventivas como la distancia mínima entre los establecimientos de juego y los centros educativos.
La importancia de la prevención
El consejero Ruiz Molina ha destacado la importancia de actuar de manera preventiva, especialmente en el caso de los jóvenes, que son más vulnerables a desarrollar adicciones al juego. Según los datos proporcionados, el 55% de la población de Castilla-La Mancha juega, y un 15% de ellos son menores de 35 años.
“Esta iniciativa es una muestra más del compromiso del Gobierno regional con la protección de nuestros jóvenes”, ha afirmado Ruiz Molina. “Queremos que los jóvenes sean conscientes de los riesgos del juego y que puedan tomar decisiones informadas sobre su tiempo libre”.
Un modelo a seguir
Castilla-La Mancha se posiciona como una región pionera en la lucha contra la ludopatía juvenil. Este proyecto innovador puede servir de ejemplo para otras comunidades autónomas y contribuir a la creación de una sociedad más informada y protegida.
