La alcaldesa de Fernán Caballero, Beatriz Dorado, ha denunciado públicamente las graves amenazas que sufrió el pasado 31 de julio en las dependencias del Ayuntamiento, en un intento de chantaje destinado a provocar su dimisión. Un episodio de extrema gravedad que ha llevado al presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, y al presidente provincial y de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, a respaldar a la regidora y a pedir un firme compromiso con el municipalismo y la convivencia democrática.
Según relató Dorado durante el Pleno municipal celebrado este lunes, lo que comenzó como la aparente visita de una vecina al Ayuntamiento se transformó en una amenaza directa hacia su persona y su familia. La alcaldesa explicó que una mujer de nacionalidad sudamericana, tras identificar detalles personales y familiares con precisión, le trasladó un ultimátum: disponía de diez días para dimitir de su cargo o sufriría consecuencias graves en su entorno. La emisaria aseguró actuar en nombre de una banda organizada, que a su vez había sido contratada por un antiguo trabajador municipal supuestamente despedido, extremo que Dorado desmintió con rotundidad al afirmar que en su mandato no se ha producido ningún despido.
“No voy a dimitir, a pesar de la amenaza que asedia mi vida personal y que creo injusta, fruto de mi condición de mujer joven al frente de un cargo institucional”, declaró Dorado, recordando que con apenas 25 años representa a sus vecinos y continuará ejerciendo el cargo con firmeza y responsabilidad.
La alcaldesa quiso agradecer el apoyo recibido por el Partido Popular de Castilla-La Mancha y la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que investigan los hechos.
Núñez: “Es una cuestión de extrema gravedad que no se puede tolerar”
El presidente del PP-CLM, Paco Núñez, calificó las amenazas de “extrema gravedad”, situándolas en un nivel mucho más alarmante que los habituales episodios de crispación política o ataques a sedes de partidos. Núñez denunció el exceso de tensión social y política que se refleja también en redes sociales y que, en su opinión, mina la convivencia democrática.
“Aquí hablamos de una alcaldesa que sufre una amenaza por el mero hecho de ser alcaldesa y hacer bien su trabajo. No se puede tolerar”, señaló.
Núñez reivindicó el papel esencial del municipalismo y recordó que los alcaldes trabajan diariamente “por el interés general, por el bienestar de sus vecinos y por cumplir el programa electoral”. En este sentido, pidió a toda la sociedad cerrar filas contra las amenazas y mostrar un apoyo firme a los representantes locales.
Valverde: “Detrás de cada político hay una persona y una familia que sufre”
Por su parte, el presidente del PP de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, subrayó la dureza de un episodio que consideró inédito en la provincia. “Que alguien entre en un Ayuntamiento, detalle con precisión la vida de una persona y le deje en un estado de incertidumbre y miedo es algo insoportable”, denunció.
Valverde apeló a la empatía ciudadana y a la necesidad de recordar que los políticos son también personas con familias que sufren el desgaste y las consecuencias de este tipo de ataques.
Unidad frente a la intimidación
Tanto Dorado como Núñez y Valverde coincidieron en que este episodio debe servir de reflexión colectiva sobre el clima político actual y la necesidad de respetar a las instituciones democráticas. El PP de Castilla-La Mancha ha mostrado su respaldo absoluto a la alcaldesa de Fernán Caballero, quien ha reafirmado que seguirá trabajando con determinación en el cargo que le encomendaron sus vecinos.