Hoy se ha dado a conocer oficialmente la declaración de las tradicionales fiestas de los llamados “Santos Viejos” de Almagro como Fiestas de Interés Turístico Provincial, una distinción que reconoce el profundo arraigo, la riqueza cultural y el valor patrimonial de unas celebraciones que forman parte esencial de la identidad almagreña.
La resolución, dictaminada este jueves, responde a la solicitud presentada en febrero de 2025 por el anterior equipo de gobierno del Partido Popular de Almagro, con el objetivo de preservar y poner en valor una de las manifestaciones populares más significativas de la provincia de Ciudad Real. La declaración supone un reconocimiento oficial a la importancia que tienen para los vecinos y visitantes unas fiestas que, año tras año, mantienen vivas las costumbres y el espíritu religioso de la ciudad encajera.
Una tradición que une a todo un pueblo desde San Antón hasta San Blas
Las festividades de los Santos Viejos se celebran en Almagro desde finales de enero hasta principios de febrero, abarcando diversas celebraciones en honor a San Antón, San Ildefonso, la Virgen de la Paz, la Candelaria y San Blas. Todas ellas conforman un ciclo festivo popular profundamente arraigado que combina religiosidad, gastronomía, música y convivencia vecinal.

El ciclo comienza la víspera de San Antón, el 16 de enero, cuando las calles de Almagro se iluminan con las tradicionales hogueras que organizan vecinos, hermandades y asociaciones locales. Una de las más destacadas es la que impulsa la Hermandad de San Isidro y San Antonio Abad, junto a la Ermita de San Juan, donde se invita a todos los asistentes a degustar el típico somallao —a base de cornachos y bacalao— acompañado de limoná, siguiendo una receta ancestral.
El Ayuntamiento organiza cada año un concurso popular de hogueras, además de premios al mejor somallao y a la mejor limoná, manteniendo viva la competitividad sana y la participación vecinal.
Siguiendo también antiguas tradiciones, el día 17 de enero se subastaba el llamado «Guarrillo de San Antón». Con la entrada en vigor de la Ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales ( Ley 7/2023, de 28 de marzo) tuvo que cambiarse esta tradición y subastar, en vez del animal vivo, una cesta y lotes de artículos derivados del cerdo. No obstante, la tradicional rifa, de todos los artículos que donan muchos de los vecinos y empresas de Almagro, se sigue celebrando a pie de la Ermita de San Juan, aunque ya sin animales vivos.
San Ildefonso: Juegos, migas y el dulce “bastón del santo”
La segunda festividad del ciclo, San Ildefonso, se celebra alrededor de la ermita homónima. Es una jornada marcada por el reencuentro vecinal, los juegos tradicionales, la música y la gastronomía popular.
Los almagreños degustan migas manchegas al mediodía (acompañadas por una verbena popular) y los emblemáticos hornazos —con o sin huevo—, además del dulce característico de esta fecha: el bastón del santo. La jornada concluye con una Solemne Función Religiosa y el ambiente festivo que caracteriza a las celebraciones invernales de la ciudad.

La Virgen de la Candelaria y San Blas: El cierre de los Santos Viejos
El ciclo de los Santos Viejos culmina con las fiestas de la Virgen de la Candelaria y San Blas, que marcan el paso del invierno hacia la Cuaresma.
Las celebraciones en honor a la Virgen de la Candelaria tienen lugar en la Ermita de San Pedro, donde los vecinos disfrutan de migas populares, música, repostería tradicional y procesión por las calles del histórico barrio de San Pedro. La devoción mariana se mezcla con la alegría y la hospitalidad que caracterizan a la ciudad encajera.
Por su parte, la festividad de San Blas, celebrada el 3 de febrero, incluye los tradicionales Laudes y Función Religiosa, así como la venta de hornazos y gargantillas, símbolos de protección y buena fortuna. En el pradillo de San Blas tienen lugar también las actividades lúdicas en honor al santo.

Un reconocimiento al patrimonio inmaterial de Almagro
La declaración de las fiestas de los Santos Viejos como Fiestas de Interés Turístico Provincial supone un paso más en la puesta en valor del patrimonio cultural inmaterial de Almagro, una ciudad universalmente conocida por su Corral de Comedias y su legado histórico-artístico, pero que también destaca por su arraigada vida popular y su capacidad para conservar tradiciones únicas.
Estas celebraciones constituyen un ejemplo de continuidad cultural y social, en las que generaciones enteras de almagreños han participado y siguen participando activamente, convirtiéndolas en una seña de identidad del municipio. Con esta declaración, la provincia de Ciudad Real refuerza su oferta cultural y turística, sumando un nuevo atractivo al calendario de fiestas tradicionales manchegas.

