Rafael Delgado Maldonado de Guevera, en nombre de los descendientes de Elena Damiana de Juren- almagreña a la que Lope de Vega dedicó una de sus obras-, descubrió la placa colocada en el zaguán del Corral de Comedias.
Almagro Noticias.- En un acto de gran valor simbólico, los almagreños recuerdan desde la tarde de ayer, sábado, 29 de septiembre, a una de sus ilustres vecinas: Elena Damiana de Juren Samano y Sotomayor (1614-1668). Almagreña que vivió sus primeros al menos 14 años de vida en la ciudad encajera, pero que nunca dejó de estar vinculada a la ciudad que le vio nacer y morada de sus antepasados, los Iuren (Juren), factores de los Fugger, banqueros alemanes que ayudaron a Carlos I de España y V de Alemania a subir al trono español.
Elena Damiana de Juren ostenta el privilegio de tener dedicado a su nombre, la obra de Félix Lope de Vega y Carpio Veinte y una parte verdadera de las Comedias del Fénix de España, volumen de doce comedias que se publicó el mismo año de la muerte del Fénix de los Ingenios en 1635. No se sabe a ciencia cierta, según las investigaciones llevadas a cabo por el cronista oficial de Almagro, Arcadio Calvo, si la almagreña y su marido Julio César de Scazuola fueron mecenas de Lope de Vega- que es sabido que al final de sus días no pasaba por buenos momentos económicos-, cuestión que bien podría ser la razón de la dedicatoria a Elena Damiana cuando tenía 21 años de edad.
“El descubrimiento de la placa con su nombre ha permitido abrir una ventana a un periodo de la Historia de Almagro del que sabemos mucho menos de lo que creemos”, expresó el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Almagro, Pedro Torres, que habló de la suerte de poder revivir y recordar a Lope de Vega en el Corral de Comedias. Un espacio al que calificó, como en otras ocasiones, de “reliquia viva de la pasión que los españoles del siglo XVII sentía por el teatro”. Y de la relación de Almagro con el teatro y con los autores clásicos, algunos más conocidos que otros. Como por ejemplo, Mateo Alemán que dejó la huella de su paso por Almagro, en su obra Guzmán de Alfarache, en el capítulo octavo y que para Pedro Torres sirvió de germen de la literatura caballeresca y por tanto también pudo influir en Don Quijote. Por su parte, el cronista de Almagro, Arcadio Calvo haciendo suyas las palabras del catedrático Carlos Álvarez Nogal dijo “hemos recuperado para la Historia de Almagro un personaje fascinante por su relación con Lope, una mujer excepcional, que al quedar viuda con 24 años, estuvo al frente de la tesorería de Cruzada y gestionó una de las rentas más importantes de la corona en aquel momento”.
Calvo habló de la ilustre vecina almagreña que siempre estuvo vinculada a Almagro. Dos curiosidades, de sus doce hijos, cinco estuvieron en Almagro en dos de los conventos de la época y donó una lámpara de plata a la patrona, la Virgen de las Nieves. Era la cuarta generación de linaje alemán de los Juren establecido en Almagro desde al menos 1538, año en el que su bisabuelo Juan de Juren fuera factor general de los Fugger. Bautizada el 2 de enero de 1614 en Almagro. Tenía dos hermanas, Juana y Francisca. Elena Damiana de Juren vivió en Almagro hasta que se casó siendo muy niña. Elena fue madre a los 15 años. Tuvo doce hijos. En 1629 era bautizado en la parroquia de San Ginés de Madrid, Luis Felipe, el primero del matrimonio Juren y Scazuola. Su marido llegó a Madrid en 1618 como representante de una sociedad en la que participaban entre otros los Fugger con el propósito de importar tejidos de Augsburgo. Scazuola fue un personaje importante de peso político y social por su relación con los Fugger y la Corona Española, Felipe IV. De sus doce hijos, cinco hijas fueron monjas en conventos de Almagro (Catalina en el desaparecido convento de Los Llanos y Antonia Magdalena, María, Andrea y Julia en el convento de Asunción de Calatrava). En 1668, falleció.
Para que su recuerdo perdure en el tiempo, Calvo dejó sobre la mesa una propuesta, que cada vez que se represente una de las comedias de Lope de Vega, dedicadas a Elena Damiana, se mencione su nombre, como una manera de estar presente en la memoria viva de los almagreños. El linaje de los Juren se extendió en Almagro hasta finales del siglo XIX, cuando se tiene documentado el último rastro de los Juren en la ciudad encajera como explicó. Rafael Delgado Maldonado de Guevara, descendiente de la décima segunda generación de Elena Damiana de Juren que fue el encargado junto a su sobrino Pablo, décima tercera generación de los Juren, de descubrir la placa que recuerda a tal insigne almagreña. El acto finalizó con la foto familiar de los descendientes de los Juren que pudieron participar ayer en el homenaje y recuerdo de su antepasado.
Sobre la dedicatoria
Lope de Vega y Carpio dedicó Veinte y una parte verdadera de las Comedias del Fénix de España. La obra comienza con las palabras que la hija del dramaturgo, Feliciana Félix del Carpio, escribió en nombre de su padre a la bisnieta de Juan de Juren, administrador de los Fugger- conocidos como los Fúcares-, que llegó a Almagro en 1538. La obra que se guarda en la Biblioteca Nacional y la que Lope de Vega dedicó a esta almagreña, se compone de doce comedias que se publicaron el mismo año de su muerte. Se trata de una edición póstuma en la que la hija del gran dramaturgo español, Feliciana Félix del Carpio, escribe la dedicatoria en nombre de su padre ya fallecido. La hija de Lope de Vega explica que su padre le pidió repetidamente que dedicara esta obra a Elena de Juren.
En ella, Lope de Vega alabó a su familia, los condes de Juren de Alemania, entre cuyas virtudes destaca la generosidad. La página anterior a la dedicatoria reproduce el escudo de armas de Elena Damiana de Juren y de su esposo, Julio César Scazuola. Las doce obras con sus títulos como aparecen en la edición póstuma de 1635 son: La Bella Aurora; Ay verdades que en amor; La Boba para los otros, y discreta de si; La Noche de San Juan; El Castigo sin vengança; Los Vandos de Sena; El Mejor Alcalde el Rey; El premio del bien hablar; la Vitoria de la honra; El Piadoso Aragonés; Los Tellos de Meseses; Por la puente Juana. No se conocen las razones de por qué Lope de Vega dedicó esta obra a Elena Damiana de Juren.
El descubrimiento de este detalle llegó por casualidad a manos del cronista oficial de Almagro, Arcadio Calvo. El investigador local trabajaba desde hace varios años en localizar la casa-palacio de los Fugger- conocidos en la ciudad como Fúcares- en Almagro. Importantes banqueros alemanes que ayudaron al rey Carlos I de España y V de Alemania a acceder al trono español. Como pago al préstamo, los Fugger recibieron y asumieron el control de las minas de Almadén que administraban y gestionaban en parte desde Almagro. En esta búsqueda del palacio de los banqueros alemanes, Calvo se topó con esta dedicatoria a Elena Damiana de Iuren- como lo escribe Lope-que salió a la luz en 2011 en un artículo publicado en la web institucional del Ayuntamiento de Almagro y posteriormente en varios medios de comunicación. A partir de ayer, 30 de septiembre, visitantes y almagreños conocerán esta curiosa historia que refuerza los lazos de Almagro con Lope de Vega.
La huella de los Fugger en Almagro
La huella de los Fugger está por toda la ciudad. Ejemplos de la presencia de más de cien años de la familia de banqueros alemanes son la iglesia de San Blas, el conocido como Almacén y Patio de Fúcares (ahora atribuido a los Xleder) o las numerosas casas y portadas que se conservan de sus empleados como los propios Juren.