El Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado un paso decisivo para resolver los históricos problemas de abastecimiento de agua potable en numerosos municipios del Campo de Calatrava, Daimiel y Ciudad Real, a través de un ambicioso proyecto de ampliación del sistema hidráulico que los conectará con la infraestructura de la Llanura Manchega. Esta actuación, que cuenta con una inversión prevista de 95 millones de euros, se materializará próximamente con la firma de un convenio de colaboración entre la Junta y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ya autorizado por el Consejo de Gobierno regional.
En una visita clave a la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) situada junto al pantano de la Vega del Jabalón, el director de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha (IACLM), Rubén Sobrino, y el delegado provincial de Desarrollo Sostenible, Casto Sánchez, se reunieron con Andrés Cárdenas, presidente de la Mancomunidad de Aguas del Campo de Calatrava, y otros representantes locales para abordar el estado actual del abastecimiento y los pasos a seguir hasta la puesta en marcha de la nueva infraestructura.
Un compromiso firme del gobierno regional
Durante el encuentro, Rubén Sobrino subrayó el esfuerzo inversor y el compromiso del Ejecutivo de Emiliano García-Page con una solución “definitiva” al problema del agua. Esta obra garantizará el suministro en condiciones óptimas de calidad y cantidad, no solo a los municipios del Campo de Calatrava, sino también a Daimiel y a los integrantes de la Mancomunidad del Gasset: Ciudad Real, Miguelturra, Carrión de Calatrava, Torralba de Calatrava, Poblete, Alcolea de Calatrava y Picón.
“Estamos hablando de una infraestructura clave, no solo por lo que supone en el presente, sino por la seguridad hídrica que aportará ante situaciones de emergencia”, señaló Sobrino.
Una red de 67 kilómetros de tubería
El proyecto contempla la construcción de 67 kilómetros de tubería, cuya ejecución ha sido encomendada por el Ministerio a la empresa pública Aguas de las Cuencas de España (Acuaes). Una vez finalizadas las obras, será Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, dependiente de la Agencia del Agua, la encargada de su gestión.
Esta actuación se suma al primer ramal del sistema de Llanura Manchega, que entró en funcionamiento en 2023 y abastece ya a más de 76.000 habitantes de 15 municipios de Ciudad Real, Cuenca y Albacete, con una inversión de 300 millones de euros.
Soluciones ante la actual escasez
La necesidad de esta nueva infraestructura se hace patente ante la insuficiencia de los recursos actuales. La ETAP de Vega del Jabalón, ubicada a pie de presa, no puede garantizar el suministro a medio y largo plazo, como ya ha quedado demostrado en los últimos años. Para paliar esta situación, la Mancomunidad ha tenido que recurrir a captaciones subterráneas de emergencia a través de pozos ya existentes.
Actualmente, se estudia la posibilidad de sondear nuevos pozos, mientras se avanza en la llegada de la Tubería Manchega al Campo de Calatrava. Tal como explicó Sobrino, estos pozos se mantendrán en el futuro como un sistema alternativo de emergencia, una vez que la nueva red esté en funcionamiento.
Una infraestructura estratégica para el futuro
El director del IACLM también destacó que esta obra no se limita únicamente a la colocación de tuberías, sino que incluye actuaciones auxiliares y complementarias para mejorar todo el sistema de abastecimiento en alta. Se trata de una planificación estratégica, alineada con el objetivo de asegurar el suministro a más de 700.000 habitantes de Castilla-La Mancha a través de los 11 sistemas de abastecimiento que actualmente gestiona la entidad.
Este gran proyecto será desarrollado en los próximos dos años, lo que implica una transformación profunda y necesaria en la infraestructura hídrica de la región.