Almagro Noticias.- En una emotiva ceremonia, el sacerdote Ángel Daniel de Toro se despidió de la comunidad de Almagro, el pueblo al que ha servido como párroco durante los últimos once años. La despedida tuvo lugar en la tarde noche del domingo, después de la misa, donde se le agradeció su dedicación en las parroquias de Madre de Dios y San Bartolomé, así como su acompañamiento en las tareas pastorales. Don Ángel, como es conocido, recibió regalos y el cariño de la comunidad católica, que lo despidió con un gran aplauso.
El evento contó con la presencia de una representación de la Corporación Municipal, encabezada por el alcalde Francisco Javier Núñez, quien expresó su gratitud por el servicio del sacerdote a la comunidad durante estos años.
El sacerdote Ángel Daniel de Toro ha sido trasladado a la vecina localidad de Granátula de Calatrava, dejando un legado de servicio y compromiso en Almagro. En su lugar, ha llegado el sacerdote Joaquín Gutiérrez Villar, proveniente de la parroquia de San Juan de Ávila de Ciudad Real. Su nombramiento fue realizado por el Obispo de Ciudad Real, Gerardo Melgar Viciosa, durante el XV Aniversario de su Ordenación Episcopal, el pasado 6 de julio.
Ángel Daniel de Toro llegó a Almagro en el año 2012 para sustituir al párroco Isidro Martín Consuegra, quien había ejercido como párroco de San Bartolomé durante 25 años. Natural de Bolaños de Calatrava, el sacerdote llegó a Almagro procedente de Socuéllamos. Realizó sus estudios eclesiásticos en el Seminario de Ciudad Real y fue ordenado sacerdote el 28 de julio de 1990.
A lo largo de su trayectoria, el sacerdote ha ejercido su ministerio en diversas localidades de la provincia. Estuvo en Alamillo, donde también atendía la Aldea de San Benito y daba clases en el Instituto Mercurio de Almacén. Luego, estuvo en Campo de Criptana, donde atendió Arenales de San Gregorio e impartió clases de Religión en el Instituto Isabel de Perillán y Quirós. Posteriormente, estuvo en Socuéllamos durante once años, antes de llegar a Almagro en 2012.
La llegada del sacerdote Joaquín Gutiérrez Villar marca el comienzo de una nueva etapa en la parroquia de Almagro. La comunidad católica recibe al nuevo párroco con entusiasmo y espera continuar fortaleciendo la fe y la vida espiritual en la localidad. La transición entre sacerdotes es un momento de cambio y renovación, pero también de gratitud por el servicio brindado por Ángel Daniel de Toro y de esperanza por el futuro bajo la guía pastoral de Joaquín Gutiérrez Villar.
